jueves, 16 de julio de 2015

A PRIMERA VISTA ( 2014 )


LA HISTORIA DE AMISTAD Y AMOR DE TRES ADOLESCENTES


PAÍS: Brasil ( 2014 )
DIRECCIÓN: Daniel Ribeiro
INTÉRPRETES: Ghilherme Lobo, Fabio Audi, Tess Amorim, Selma Egrei, Eucir de Souza, Naruna Costa, Júlio Machado, Isabela Guasco, Lúcia Romano, Victor Filgueiras
GÉNERO: Drama
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Surtsey Films
DURACIÓN: 97 minutos
SINOPSIS:
Termina el verano en São Paulo. Leonardo, de 15 años, es ciego. Le gustaría ser más independiente, estudiar en el extranjero… y también enamorarse. Un día llega a su clase Gabriel, un alumno nuevo. Ambos adolescentes se van acercando y, poco a poco, su amistad parece evolucionar hacia otra cosa. ¿ Pero cómo podría Leonardo seducir a Gabriel y saber si le gusta sin poder verlo ?
 ( Fuente de la sinopsis y del cartel: Surtsey Films )

CRÍTICA:
Daniel Ribeiro dirige su primer largometraje, 4 años después de haber iniciado la historia con un corto, a partir del cual está basada esta película. En " Eu Não Quero Voltar Sozinho ( 2010 ) " ya estaban los mismos protagonistas, y fue un éxito sobre todo en su país, pero también en otras ciudades, sobre todo en Europa.
La película también ha tenido una repercusión mundial, y se ha podido ver en muchos festivales, entre ellos el de Berlín en 2014 ( en donde ganó un premio ). La cinta fue seleccionada por su país para comeptir por el premio Óscar a la mejor película de habla no inglesa en 2015. La historia es sencilla y bastate convencional, pero eso no significa que sea una mala película. No todo el cine tiene que ser original e innovador, y de vez en cuando nos podemos encontrar con una propuesta que no busca ningún tipo de giro, y que su mérito está en la concepción original, teniendo en cuenta la premisa de que Ghilherme Lobo no es ciego en su vida real ( lo mismo que sucede con la protagonista de " Blind ( 2014 ) " que casualmente se estrena el mismo día en los cines españoles ). " A primera vista " es otra gran película brasileña, al igual que otras que están llegando en los últimos años a las carteleras españolas, como " El lobo detrás de la puerta (  2013 ) ", " Una segunda madre ( 2015 ) " y " Luna en Brasil ( 2013 ) ". 


Ghilherme Lobo ( Leonardo ) y  Tess Amorim ( Giovana ) son unos adolescentes inseparables, y que pasan todo el día juntos, tanto en la escuela como en sus ratos libres en la piscina de la casa familiar de la chica o en casa de él estudiando. Además ella es quien le acompaña a todos los sitios para hacer más fácil su vida diaria, teniendo en cuenta que él es ciego desde nacimiento. Pero cada uno tiene sus inquietudes, más teniendo en cuenta que tienen una edad en donde los jóvenes comienzan a tener parejas o empiezan a salir por la noche. La familia de Leonardo, y en especial su madre, es protectora de su hijo menor y no quieren que llegue tarde ni dejarle solo, por ser una persona invidente. El joven no lleva muy bien esa situación, porque se da cuenta que está perdiendo una oportunidad de divertirse. Pero también está la figura paterna, que aunque comparte en el fondo el pensamiento de la madre, tiene otra manera de actuar con su hijo mucho menos agresiva e intentando solucionar las cosas con el diálogo. 


A partir de aquí vamos conociendo las inquietudes del protagonista, que además de a su amiga tiene a otra persona a la que cuenta sus inquietudes ( su abuela, a la que ve uno o dos días a la semana ), y la difícil relación con sus compañeros que aprovechan su incapacidad física para ser el centro de sus burlas. Pero de repente aparece en escena otro personaje, Gabriel ( Fabio Audi ), que se hará amigo de los dos protagonistas, y que poco a poco irá desplazando a Giovana en la amistad con Leonardo, teniendo en cuenta que tienen que preparar un trabajo en pareja. Hay muchos detalles curiosos, como la manera de tomar las notas el protagonista, en una máquina de escribir que pasa las palabras a braille. 


Un guión muy sencillo, y que las pocas situaciones en donde todo es bastante convencional, pero que funciona perfectamente en el tipo de historia que nos quieren contar. La fuerza se encuentra en las interpretaciones y en los diálogos. Mucho mérito tiene la interpretación de Ghilherme Lobo, pero también lo hacen bien el resto de adolescentes, sobre todo la joven protagonista Tess Amorim.
Tanto la fotografía como la banda sonora son las adecuadas, y no se busca ningún tipo de imagen rebuscada. En cuanto a la banda sonora nos encontramos con una mezcla de música clásica ( la que le gusta a Leo ) y canciones pop ( las que escucha Gabriel ). 


Con momentos emotivos, pero sin llegar a ser melancólica, y lo más importante es que no aburre.
Recomendable a los aficionados a las películas sencillas y que retratan la vida de unos adolescentes, teniendo en cuenta que uno de ellos es ciego. Su vida diaria con las inquietudes y los problemas.
 
SPOILERS:
Me gusta como presenta a los personajes, desde la primera escena en la piscina en donde Leo y Giovana están hablando y ella le acompaña a su casa. A los pocos minutos ya conocemos que es ciego. Lo mismo con la condición de homosexual, y que esté enamorado de Gabriel. Ambos asuntos están tratados de manera perfecta, sin excederse en sentimentalismos, pero sin ocultar detalles importantes. Sobre todo que las cosas suceden en el momento adecuado, y juega muy bien con los tiempos de la historia.
 

Me gusta la manera de mostrar como el padre intenta ser más comprensivo con su hijo, y se pone de manifiesto en la escena en donde se afeita por primera vez. La madre termina dándose cuanta y en la parte final es mucho más comprensiva, sin necesidad de ceder en asuntos fundamentales. 
Es verdad que el final es bastante previsible, con Leonardo y Gabriel que son pareja, pero hasta llegar a este punto han tenido que pasar por diferentes etapas, que están muy bien contadas. También vemos como se enfría la relación de amistad entre Leo y Giovana, y hay una circunstancia que hace que vuelvan a hablarse ( aunque su amistad no será lo mismo que antes de la llegada de Gabriel ).


LO MEJOR: El mérito de Ghilherme Lobo de interpretar a un invidente sin serlo. La sensiblidad con la que se aborda la historia.
LO PEOR: Ser demasiado convencional. El previsible final.

CRÍTICAS EN BLOGS Y MEDIOS ESPECIALIZADOS:

José Antonio Alarcón en Séptimo Escenario  6 / 10

Carlos Marañón en Cinemanía  3,5 / 5

Yago García en Sensacine  3,5 / 5

Andrea Núñez-Torrón en El Antepenúltimo Mohicano  4 / 5

DeCine21  4 / 10 

Marina Cisa en Videodromo 

Susana Peral en Cineralia  3 / 5

Aolberto Bermejo en Metrópoli  2 / 5

Sheyla López en El Palomitrón  3 / 5

Daniel Rojas en Cine Baguette

Federico Marín Bellón en Abc  3 / 5

Boyd Van Hoeij en The Hollywood Reporter  4 / 5 

Jay Weissberg en Variety  3 / 5

Leslie Felperin en The Guardian  3 / 5 

Dave Calhoun en Time Out London  3 / 5

Clayton Dillard en Slant Magazine  3 / 4

Andy Webster en The New York Times  4 / 5

Liz Beardsworth en Empire  4 / 5

Inkko Kang en The Wrap  3 / 4

Violet Lucca en Village Voice  3 / 5

Peter Keough en Boston Globe  2,5 / 5

Michael O´Sullivan en Washington Post  5 / 5

Tirdad Derakhshani en Philadelphia Inquirer  3,5 / 5

Brian Welk en Sound on Sight

DÍAS DE CINE:


ENTREVISTA AL DIRECTOR:

Leonardo, el protagonista de su película, es invidente y gay, pero su historia se parece a la de cualquier adolescente...
La película retrata a un adolescente que descubre su sexualidad y no solo su orientación sexual. Para Léonardo, lo importante no es ser gay, sino vivir la experiencia del primer amor, del primer deseo y todas las experiencias nuevas que se viven en la adolescencia.
Creo que todos hemos vivido eso. Es una historia universal y, homosexual o no, ciego o no, todo el mundo puede comprender los sentimientos de Leonardo.


Sin embargo, ¿el hecho de que Leonardo sea invidente no cambia su relación con el mundo como adolescente y homosexual?
Por supuesto. Siempre se piensa en la mirada como un elemento primordial de las relaciones, sobre todo en la comunidad homosexual, donde mirar y ser mirado es esencial. La película habla de la importancia de la mirada, pero también del hecho de que la atracción y la sensibilidad también puedan provenir de otros sentidos, del tacto, del olfato...
Dicho esto, no creo que el hecho de ser ciego influya más allá en Leonardo. Influye más en la historia que en el personaje. Para Leonardo, ser ciego no es ningún problema, al igual que su sexualidad. Para mí era importante reflejar esa despreocupación. Él nació ciego, está acostumbrado y no se lamenta de su suerte. Lo que le disgusta es la manera en que determinadas personas reaccionan a su alrededor. Creo que muchos discapacitados sienten lo mismo: no quieren que se les trate de forma diferente, solo quieren parecer normales y especiales a la vez, como cualquiera.


Curiosamente, el hecho de que Leonardo quiera ser independiente parece ser el origen de dramas más importantes que su salida del armario...
Ya se han hecho muchas películas sobre la homosexualidad. Algunas son fantásticas, pero creo que, hoy en día, hemos superado esa fase y debemos avanzar. El filme muestra que el «drama» de salir del armario puede superarse, ¡incluso en Brasil! En mi película, el problema reside en el «¿quién me corresponde?» y no en el «¿a quién amo y por qué la o lo amo?». Yo quería un personaje que buscara simplemente ser feliz, que descubre en la adolescencia que es gay, pero para quien este descubrimiento forma parte, de manera natural, de los descubrimientos que se hacen a esta edad, como los cambios en el cuerpo y los sentimientos. Por lo tanto, sí, es su deseo de independencia lo que cobra protagonismo y es una fuente de conflicto para su entorno: su padre y su madre, y también su mejor amiga, Giovanna, que temen perderle...


Puesto que Leonardo no puede ver, usted no podía filmar su “punto de vista”. Como director, ¿se ha sentido limitado por dicha discapacidad?

No, más bien me han entrado ganas de jugar con la discapacidad, a través de las imágenes, como en la escena donde Leonardo, sentado en la hierba, por la noche, le pregunta a Giovanna si ha visto a Gabriel y ella le responde que no, simplemente porque quiere quedarse a solas con él aunque Gabriel esté en su campo de visión.

Por este motivo, he trabajado mucho en los sonidos que le llegan a Leonardo desde su punto de vista, como en la escena en que él quiere dejar la escuela solo y en que sus compañeros juegan a su alrededor. Para un director, estéticamente resulta interesante poder jugar con estos elementos. El sonido no siempre se valora debidamente, por lo que fue muy emocionante potenciarlo en mi película. El hecho de que Leonardo sea ciego me obligó a prestar más atención a todo eso; me siento muy satisfecho por ello. Y quizá yo mismo prestaré más atención en el futuro, cuando haga películas con «videntes», a todo lo que forma parte del cine y no es puramente visual.

Háblenos de sus actores.
Antes de dirigir A PRIMERA VISTA, hacía tres años que había dirigido un cortometraje sobre el mismo tema, Eu nao quero voltar sozinho. Había elegido a mis actores para el cortometraje y volví a recurrir a ellos para el largometraje: había tanta alquimia entre ellos que para mí estaba claro. En ese tiempo, habían envejecido tres años, por lo que hay un trato muy diferente al del cortometraje, con problemáticas de sexualidad que se abordan de manera más frontal, cuerpos más expuestos en la pantalla, el tema de la independencia más centralizado.
Hablamos mucho con los actores, intercambiamos ideas. A veces, ellos habían pensado más en sus personajes que yo mismo... Algunos momentos del guion no estaban muy bien definidos: yo podía decirles «caminan por la calle mientras hablan» y a ellos les tocaba pensar en lo que debían decirse. Me gusta actuar de este modo, atrapar al vuelo lo que cada uno puede aportar a la película. Con el director de fotografía o el equipo técnico fue parecido; desde los puestos que ocupaban, en ocasiones veían cosas de las que yo no me daba cuenta.

¿Cómo trabajó con Ghilherme Lobo, que interpreta a Leonardo en el film?
Desde que escribí el cortometraje hacía tres años, mi principal preocupación era encontrar al joven actor que pudiera interpretar a un personaje invidente. Entonces conocí a Ghilherme, que apenas tenía 14 años por aquel entonces, y desde la primera sesión de pruebas encontró la manera de interpretar a Leonardo, ocultando brillantemente su mirada tras esa mirada lejana que apreciamos en él en la película. Ghilherme es muy intuitivo y observador. Después de elegirle pasamos tiempo en instituciones de invidentes, donde aprendió a ser guiado y donde los demás actores aprendieron a guiarle. También aprendió a utilizar la máquina de escribir en braille, entre otras cosas.
  ( Fuente del texto: Surtsey Films )

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