miércoles, 6 de mayo de 2020

ATLANTIS (2019)


LAS SECUELAS DE LA GUERRA


PAÍS: Ucrania (2019)
DIRECCIÓN: Valentyn Vasyanovych
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO DEL DIRECTOR: 21 de Julio de 1971, Zhytomyr (Ucrania)
INTÉRPRETES: Andriy Rymaruk, Liudmyla Bileka, Vasyl Antoniak, Aykhan Hajibayli
GUIONISTA: Valentyn Vasyanovych
FOTOGRAFÍA: Valentyn Vasyanovych
GÉNERO: Drama
PRODUCCIÓN: Ukrainian State Film Agency, Garmata Film Production, Limelite
DURACIÓN: 106 minutos
PREMIOS: 7 premios, incluyendo uno en el Festival de Venecia y otro en el de Sevilla de 2019



SINOPSIS:
Valentyn Vasyanovych, productor y director de fotografía de aquel hit del cine ucraniano que fue The Tribe, se sienta ahora en la silla de director con este film distópico que imagina un futuro en el que Ucrania ha quedado destruida después de una guerra con Rusia. El protagonista es un exsoldado con estrés postraumático que se unirá a una misión para exhumar a las víctimas de la guerra. Mejor película de la sección Orizzonti del Festival de Venecia.
 (Fuente de la sinopsis: D´A Film Festival)
 (Fuente del cartel y las imágenes: IMDb)
 (Fuentes de la información de la película: Filmaffinity, D´A Film Festival, IMDb)


CRÍTICA:
El director ucraniano Valentyn Vasyanovych fue el productor de dos de las películas más interesantes, pero a la vez más raras, que nos llegaron hace unos años de Ucrania. Se trata de “The tribe” y “Home Games “. Ahora él mismo ha dirigido, ha escrito el guion y se ha preocupado de la fotografía de su nueva película. Una cinta que es difícil de catalogar en ningún género, pero que no dejará indiferente a nadie. Fue una de las sensaciones del pasado Festival de Cine de Venecia, se presentó en la sección Orizzonti y tuvo el honor de llevarse el premio a la mejor película. En nuestro país formó parte de la sección oficial del Festival de cine de Sevilla donde obtuvo el premio a la mejor fotografía, y ahora tenemos la suerte de poder verla en una nueva edición del Festival de cine de autor de Barcelona dentro de la sección Transicions.


La historia está ambientada en un futuro cercano, concretamente en el año 2025, justo un año después de que terminara la guerra entre Ucrania y Rusia. La zona está completamente destrozada y desértica. El mayor problema no es la situación económica, sino más bien la ecológica. El trabajo es escaso y las condiciones de vida son inhumanas. La película empieza con las imágenes de dos amigos ex soldados que para pasar el rato disparan contra unos muñecos. Ambos tienen graves secuelas psicológicas y su trabajo en una empresa siderúrgica no les impide olvidar todo lo que han vivido. Es tanto que uno de ellos no aguanta la presión y termina suicidándose.
Pero no queda otra opción que seguir hacia adelante, por eso el compañero decide pasar a formar parte de una asociación llamada Tulipán negro, que se encarga de desenterrar cuerpos, tanto de soldados ucranianos como rusos para que puedan tener una sepultura digna. Llama la atención como nos van describiendo el estado en que está cada uno y todo lo que les pudo ocasionar la muerte. Aparte Sergiy trabaja llevando un camión cisterna lleno de agua, para abastecer a todos los que siguen trabajando en la construcción de un puente. Es tan grave la falta de agua que llama la atención la imagen donde el protagonista se monta su propio jacuzzi para tomar un baño.


El principal objetivo del director es mostrarnos esa realidad y para ello utiliza un enfoque de la cámara bastante especial, que hace que el espectador se involucre en la trama. Para mi gusto abusa demasiado de unos planos fijos e interminables, que muchas veces no te llevan a ningún sitio. Intenta mostrar un ápice de esperanza dentro de la gran tragedia, sobre todo en las escenas finales. La cinta es dura, incómoda e incluso diría que desagradable en algunos tramos. Pero creo que es exactamente lo que pretende Vasyanovych. La fotografía es estupenda y visualmente también. Creo que no sabe muy bien como cerrar la historia, por eso en varios tramos parece que puede terminar, pero nunca llega el momento. No es un tipo de cine para todos los públicos, pero creo que merece la pena su visionado.
Puntuación: 6/10


LO MEJOR: El impacto que provoca en el espectador y la escena del jacuzzi improvisado.
LO PEOR: Algunas escenas son interminables.

(Crítica escrita por Christopher Laso)

CRÍTICAS EN BLOGS ESPECIALIZADOS:

Miguel Martín en Nos Hacemos un cine en Orión


TRAILER:


(CRÍTICA DE CHRISTOPHER LASO)

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