EL TRIÁNGULO DE LA TRISTEZA (2022)

UNA SÁTIRA MUY MORDAZ, CON UN GUION PERFECTO

PAÍSES: Suecia-Francia-Reino Unido-Alemania-Dinamarca (2022)
TÍTULO ORIGINAL: Triangle of sadness
DIRECCIÓN: Ruben Östlund
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO DEL DIRECTOR: 13 de abril de 1974, Fredrik Wenzel (Suecia)
INTÉRPRETES: Harris Dickinson, Charlbi Dean, Zlatko Buric, Dolly De Leon, Vicki Berlin, Woody Harrelson, Henrik Dorsin, Sunnyi Melles, Jean-Christophe Folly, Iris Berben
GUIONISTA: Ruben Östlund
FOTOGRAFÍA: Fredrik Wenzel
GÉNERO: comedia
PRODUCCIÓN: Plattform Produktion, SVT, Film I Väst, Coproduction Office, Arte France Cinéma, Eurimages, ZDF/Arte, Imperative Entertainment, BBC Films, Essential Filmproduktion, Sovereign Films, Svenska Filminstitutet, Medienboard Berlin-Brandenburg, Det Danske Filminstitut, British Film Institute, Nordisk Film, Bord Cadre Films, Canal+, Ciné+, Heretic, Piano Producciones, Creative Europe Media
DISTRIBUIDORAS EN ESPAÑA: Avalon Distribución, Elástica Films
AGENCIA DE COMUNICACIÓN: MadAvenue
DURACIÓN: 149 minutos
PREMIOS: 20 premios, incluyendo uno en el Festival de Cannes de 2022

SINOPSIS:
Una pareja de modelos son invitados a un crucero de lujo. Cuando el yate se hunde acaban en una isla desierta con un grupo de multimillonarios y una señora de la limpieza. En la lucha por la supervivencia, las antiguas jerarquías se trastocan ya que la limpiadora es la única que sabe pescar.

 (fuente de la sinopsis: Avalon Distribución)

 (fuente del cartel: MadAvenue)

 (fuentes de las imágenes: MadAvenue, IMDb, Sensacine)

CRÍTICA:
El nuevo trabajo del director sueco Ruben Östlund, responsable de "Fuerza mayor" y "The square", que tiene el honor de que sus dos últimas películas ("The square" y "El triángulo de la tristeza") fueran premiadas con la Palma de oro en el Festival de Cannes, es una comedia satírica con una crítica al capitalismo, pero también al comunismo, a la sociedad actual, a la diferencia de clases, a las redes sociales y a los defectos de los hombres y las mujeres.
La cinta se presentó en la pasada edición del Festival de cine de Cannes, en donde ganó la Palma de oro a la mejor película. En nuestro país se estrenó en la sección perlas del Festival de San Sebastián, en donde tuve la suerte de poder verla, fue la que más me gustó de las que vi en el Zinemaldia 2022, y hacía tiempo que no me reía tanto en una sala de cine, y está nominada a tres premios Óscar (los de mejor película, dirección y guion original).

El guion escrito por el propio Östlund es magnífico, atiza a todo el mundo, y no deja títere con cabeza, incidiendo de manera sutil en el sinsentido del comportamiento del ser humano, el egoísmo, la búsqueda de la fama, y a una obsesión por el dinero propia de la sociedad capitalista en la que vivimos en el mundo occidental.
La película de cerca de 3 horas de duración está dividida en 3 partes, que son continuación una de otra, y logró mantener mi interés desde la primera escena en una empresa de moda hasta ese final tan interesante en una isla (es verdad que la última parte es más irregular que las dos anteriores). La primera escena provocó mi primera sonrisa, cuando Carl está en un casting de modelos, y posteriormente en una cena romántica de los dos protagonistas, en donde Yaya ridiculiza a su novio.

Los protagonistas de la película, al menos en la primera parte son Carl y Yaya, una pareja de modelos e influencers. Ella tiene mucho más éxito que él en redes sociales, y la contratan para pasarelas de moda. En esa parte inicial hay una crítica al mundo de la moda, en una primera media hora con unos diálogos muy divertidos, que reflejan como son los dos jóvenes protagonistas.
La segunda parte se traslada a un crucero de lujo, y aparecen en escena unos personajes secundarios muy bien diseñados, que cada uno tiene su momento, en unas historias personales muy peculiares. Los diálogos siguen funcionando, en una sucesión de situaciones cómicas muy bien escritas, y poco a poco se van añadiendo los gags visuales, algunos escatológicos. Esta parte central me recordó bastante a las mejores películas de Blake Edwards protagonizadas por Peter Sellers, por su sentido del humor y surrealismo, que me divirtieron mucho, sin perder la coherencia argumental.

La parte final tiene un buen arranque y un gran desenlace, y algún que otro parón a la mitad de la supervivencia de los personajes en un isla desierta, con un par de conversaciones muy ingeniosas, en especial el de la trabajadora en el yate que antes era una persona sin ningún poder en ese lugar y que con el cambio de escenario se convertirá en la líder con todo el poder para manejar a su antojo al resto.
Una buena película no necesita más que un gran guion, una buena dirección, el saber emplear en los momentos adecuados los elementos técnicos necesarios, y unas interpretaciones solventes, con unos protagonistas que cumplen en sus papeles protagonistas, y unos secundarios que lo hacen bastante bien, y que han sido muy bien seleccionados (un gran trabajo de la dirección de casting):
Una gran película que puede gustar a casi todo el mundo, en especial a los que disfrutan con las sátiras con crítica social de fondo, que recomiendo que vayan a verla cuando se estrene en los cines españoles.

LO MEJOR: El guion. La dirección. Es muy divertida y es muy sutil en la crítica social.
LO PEOR: Hay un ligero parón en la parte central del último capítulo.

CRÍTICAS EN BLOGS ESPECIALIZADOS:

Pedro de Frutos en El Ónfalos

Ricardo Pablo López en Destino Arrakis

Yolanda Aguas en Cinet Farö

Chechu en Los Lunes Seriéfilos

Roberto Resino en Argoderse

Daniel Lucena en MacGuffin007

Iván Pimentel en Butaca y Butacón

PODCASTS:

 

 

TRÁILER: