LOS ELFKINS (2019)

AYUDANDO A TEO

PAÍS: Alemania (2019)
TÍTULO ORIGINAL: Die Heinzels - Rückkehr der Heinzelmännchen 
DIRECCIÓN: Ute von Münchow-Pohl
AÑO Y LUGAR DE NACIMIENTO DE LA DIRECTORA: 1958, Bremen (Alemania)
INTÉRPRETES: Jella Haase, Louis Hofmann, Leon Seidel, Detlef Bierstedt, Elke Heidenreich, Rolf Berg, Ranja Bonalana, Marie-Luise Marjan
GUIONISTA: Jan Strathmann
MÚSICA: Alex Komlew
GÉNERO: animación
PRODUCCIÓN: Akkord Film Produktion GmbH, Tobis Film, ZDF, Deutsches Filmorchester Babelsberg, Studio Rakete
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: VerCine
DURACIÓN: 78 minutos

SINOPSIS:
Durante más de 200 años, los Elfkins han estado viviendo bajo tierra, escondiéndose del mundo superior y evitando cualquier interacción con los seres humanos. Un día, Elfie, Kipp y Buck deciden subir a la superficie de la tierra. Después de muchas aventuras, Elfie se hace amiga de Teo, un chef pastelero un poco gruñón que le recordará a ella y a todos los Elfkins su verdadero propósito en la vida: ¡ayudar a los demás!
(fuente de la sinopsis, el cartel y las imágenes: VerCine)
(fuentes de la información de la película: Filmaffinity, VerCine, IMDb, Wikipedia)

CRÍTICA:

El sexto largometraje dirigido por la cineasta alemana Ute von Münchow-Pohl, la responsable de una película que hace tres años llegó a los cines españoles titulada "Rabbit School. Los guardianes del huevo de oro (2017)", vuelve a ser una película correcta a nivel técnico de animación y que va dirigida principalmente al público infantil. Los dos proyectos están años luz del cine medio europeo del género, y de otra película alemana como "Fritzi, un cuento revolucionario", estrenada una semana después que "Los Elfkins".
La película tiene un buen arranque con la presentación de los personajes protagonistas, tanto de esos seres tan diminutos que viven bajo tierra como del pastelero Teo, cuyo negocio está en horas bajas, desde que está enfrentado con su hermano Bruno.

Una vez que esa especie de gnomos se mueven por las calles de Colonia la película baja el nivel, en especial porque se da prioridad al entretenimiento y a las escenas de acción frente a una historia bien desarrollada, y tampoco conecté con esos momentos que quieren sacar una sonrisa al espectador.
La historia vuelve a ganar en interés cuando aparece en escena Bruno, el malo de la película, que intenta torpedear cada uno de los movimientos de los Elfkins ayudando a sacar adelante la panadería Hampus, el negocio del entrañable pastelero Teo.
Una película que gustará a los más pequeños de la familia, ya que tiene todos los elementos que buscan en una cinta de animación, pero defraudará a los que buscamos cosas diferentes en las propuestas de este género, ya que ni siquiera la banda sonora y el diseño de animación de los escenarios o los personajes son atractivos.

 

LO MEJOR: La presentación de los personajes.
LO PEOR: Va dirigida al público infantil y puede aburrir a los adultos.

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Ricardo Pablo López en Destino Arrakis

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